En el corazón del municipio de Valdemorillo, en la provincia de Madrid, se encuentra un lugar seguro, encantador y mágico que nos ha conquistado: Los Ponis de María. Un plan al aire libre en el que los niños (recomendado hasta los 12 años) establecen una conexión muy especial con estos animales. Aprenden valores esenciales como la empatía, el respeto a la naturaleza o el amor por los animales.
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Los Ponis de María: Una experiencia única para familias en Valdemorillo

Para mi hija era la primera vez que hacía una actividad con ponis (este verano probamos la experiencia de montar a caballo) y la verdad que ha sido muy especial. Creo que parte del éxito de este plan al aire libre para familias radica en que se realiza en un entorno en plena naturaleza, salvaje y en el que casi no hay cobertura.
Otra pieza importante es que aquí no hay horarios, ni colas, ni esperas… Todo fluye de manera natural. ¡Cada uno se siente libre de realizar la actividad a su ritmo! Y luego está María, que es encantadora y está muy pendiente de todo y de todos.
La conexión entre los ponis y los niños

¿En qué consiste la actividad que organiza Los Ponys de María? Primero conocemos a estos animales. Son muy mansos y muy buenos. Y, aunque tú puedes elegir quién será tu acompañante durante la próxima hora-hora y media, al final María te orienta para que vaya mejor con la edad de tu hijo y con su altura.
Nosotros nos enamoramos de Pedrito (los nombres los ha elegido María al azar según la cara que tenía el animal y el feeling que le daba), un poni blanco precioso pero, como mi hija de 10 años es alta, iba a dar con los pies en el suelo.
María tenía una alternativa guardada para nosotros: Vito, un poni blanco y marrón igual de bonito (o más, según mi hija) que Pedrito. Y ahí empezó una relación de amistad única entre mi hija y Vito.
Primero se conocieron. Ana le hablaba al oído, le acariciaba, le sonreía… Y Vito respondía con su mirada. Y cuando ya parecía que conectaron, Ana se decidió a pasear a Vito por la finca. El día fue soleado, así la aventura era perfecta.
Pero no se trata solo de diversión: durante la actividad, los pequeños aprenden a cuidar de los ponis, a tratarlos con respeto y a comprender la importancia de la responsabilidad. Y así llegó el momento de cepillarle, peinarle, ponerle flores e, incluso, hacerle trenzas.
Y tras un buen rato (como os he explicado al principio aquí no hay prisa), pasamos a montar a Vito y pasear. Primero íbamos con María, que nos indicó cómo hacerlo y nos contó más de un detalle importante del cuidado de los ponis, y luego somos los padres los que guiamos al poni y a los niños. ¡Maravilloso!
Un cumpleaños en los Ponis de María

¿Sabías que en los Ponis de María organizan cumpleaños? Nos parece un plan perfecto y, sobre todo muy diferente, para que los niños pasen un día estupendo y el cumpleañero recuerde esta fecha para toda su vida. Con lo divertida y espontánea que es María, ¡se lo pasarán pipa!
Por cierto, esta finca de Valdemorillo está muy cerca del pueblo de Navalagamella, un rincón de Madrid en el que puedes hacer una preciosa excursión con niños. Hay una preciosa ruta circular bautizada como la senda de los molinos con un paisaje de cuento. Así que nuestra recomendación es que combines la visita a los Ponis de María con esta propuesta de senderismo.
Y si quieres, así lo hicimos nosotros, comimos en la misma finca. Nos llevamos nuestro bocata de tortilla, nuestras latas de aceitunas y mejillones y nuestra bolsa de frutos secos para rematar el día (luego nos lo llevamos y lo tiramos en un contenedor de basura). Por cierto, María tiene una mini nevera en la que comprar bebida fresquita (lo digo para los días de calor).
Consejos para tu visita a Los Ponys de María
Si estás pensando en visitar Los Ponis de María, aquí van algunos consejos prácticos:
- Reserva con antelación: La demanda suele ser alta, especialmente los fines de semana y festivos.
- Lleva ropa cómoda: Recuerda que estarás en contacto con la naturaleza, así que elige prendas adecuadas para caminar y jugar. Y pone especial hincapié en el calzado.
- Protección solar: Si el día es soleado, no olvides protector solar y gorra para los niños.
- Cámara de fotos: Querrás capturar cada momento, desde el primer paseo en pony hasta las sonrisas en los talleres.



